Carteles toros Zaragoza San Jorge 2025
Tauromaquia. En las dos novilladas y las dos corridas de toros programadas se dan cita varios de los nombres más futuribles de cara a campañas venideras. Toreros llamados por sus condiciones a integrar ese relevo generacional que está a punto de producirse en este arte.
Especialmente llamativas son las dos novilladas ofertadas, ambas en modalidad de mano a mano. La primera el 19 de abril (Sábado de Gloria) supone una competencia regional entre Cristiano Torres y Aarón Palacio, dos de los noveles de la tierra con más ambiente. Torres, torero de dinastía, de estilo recio, con el valor y la determinación por bandera. De concepto más artista Palacio, con un modo de interpretar sugerente y expresivo. Todo un duelo de contrastes. Los novillos pertenecen a la ganadería de José Cruz.
El martes 22, con ganado de Montealto, se ven las caras Marco Pérez y Javier Zulueta. El primero de ellos, último caso de precocidad taurina, ha llamado la atención de aficionados y profesionales por su intuición y desparpajo delante de los animales desde su más tierna infancia. Zulueta, que ya triunfó en esta plaza en la Feria de El Pilar, pertenece a la escuela sevillana y así siente y ejecuta el toreo. Con los valores y el sentimiento de sus predecesores.
Y como plato fuerte, el Domingo de Resurrección (20 de abril) y el día de San Jorge (miércoles 23), dos corridas de toros en las que se dan cita jóvenes aspirantes, que han dado que hablar en este arte y están posicionados para coger el testigo de sus mayores. El más veterano es Paco Ureña, torero ya contrastado, que hace el paseíllo el Domingo de Pascua junto a Fernando Adrián, triunfador del pasado San Isidro, y Ginés Marín, puntal de su generación, que ha abierto la Puerta Grande de Las Ventas hasta en dos ocasiones.
El día de la fiesta grande, con ejemplares de Julio de la Puerta, comparecen en el coso de Pignatelli David Galván, revelación del pasado año en Madrid, Borja Jiménez, el torero más laureado de 2024, con triunfos en Madrid, Sevilla, Bilbao, Pamplona… y el joven Tristán Barroso, que tiene anunciada su alternativa unos días antes en Arles, y hace en Zaragoza su debut como matador en España.
Una oferta generosa, un alarde en tiempos de mesura, que se complementa con la oferta cultural y gastronómica que ofrece una de las ciudades españolas que más se ha adentrado en la modernidad en las últimas décadas. Toda una tentación para los sentidos en esta primavera con los toros como excusa. Atrévete a descubrirla.
